Había que ganar y se ganó, para mejorar aún hay tiempo

Volvió el fútbol al Monumental, el equipo de Angel Cappa venía con todas las ganas intactas de su ardua e intensa pretemporada con amistosos incluidos. El estadio estaba lleno, la expectativa era inmensa y las ganas de comenzar con el pie derecho eran las de todos. El sistema planteado era un 4-2-3-1 del con el juvenil Manuel Lanzini, Ariel Ortega y Diego Buonanotte rotando por detrás del delantero Rogelio Funes Mori. Desde el inicio lo que se vislumbraba era un partido complicado en el que los dos lucharían sin cesar por conseguir los tan valiosos tres puntos. Tigre se paró muy bien en defensa y Funes Mori no podía tocar la pelota e incluso tampoco Buonanotte y Ortega. A pesar de eso, el millonario buscó los espacios por las bandas con Ferrari y Arano pero ninguna de ellas llegaron a buen puerto. Lanzini encaró en varias oportunidades pero no se lo veía del todo cómodo dentro del campo de juego al igual que Buonanotte quien no gravitó y estuvo fatidioso casi todo el partido. Ojo, con razón en reiteradas veces porque le pegaron por todos lados y el arbitro Pablo Lunatti ni siquiera advirtió a los rivales. El rival tuvo algunas situaciones pero Juan Pablo Carrizo en su regreso al arco millonario se mostró seguro y tranquilo ante las situaciones del conjunto dirigido por Ricardo Caruso Lombardi. Las jugadas de peligro de River eran por las bandas y una de ellas fue de Ferrari que desbordó por la derecha a los 44 minutos y cedió el balón a Ortega, cuyo derechazo se fue cerca del palo derecho de Daniel Islas. Para afrontar el complemento Cappa decidió sacar al pibe Lanzini y poner a Facundo Affranchino. Una jugada arriesgada porque no estaba teniendo un mal partido pero es cierto que no se lo notaba cómodo. De esta manera, Almeyda no estaría tan sólo en el medio con Acevedo. Tigre fue más dominante pero una vez más se econtró con Carrizo, el hincha millonario sufría a cada momento. Si ellos hubieran estado más firmes en la definición y los pases, el partido hubiera sido otro. A los 16 llegó una para la banda con un buen centro de Ortega que conectó Funes Mori de cabeza pero la pelota pegó en el techo del arco. Apenas desviada. Orteguita y Buonanotte se asociaron a los 19, el enano se sacó a un hombre de encima, tocó con Ortega y este habilitó magníficamente a Ferrari que no llegó porque fue anticipado justo por Islas. El visitante siguió propopiendo pero el arquero millonario estaba infalible. A los 27 Angel apostó por Caruso en lugar de Acevedo mostrando que quería ganar el encuentro. Se terminaba el partido y seguía el empate en cero hasta que a los 2 minutos de adicción llegó el gol agónico de Funes Mori tras un gran pase de Ortega. Deliró el Monumental, le dio aire a todo el plantel, el Melli festejó desaforado hacia la gente millonaria. La última imagen del partido la decia todo: Ortega levantando las manos incitando a la gente a cantar, el Pelado cuando el arbitro pitó el final llevando a sus compañeros a saludar y a agradecer a todos los hinchas que los acompañan en este díficil momento. Felicidad, alegría pero ahora lo que falta es el juego, de a poco se dará eso pero aún hay que trabajar y mucho, eso está claro.Imagen: Facebook oficial de River