No aclares que oscurece Pipo

Pipo Gorosito ofreció hoy una conferencia de prensa luego del baile que sus jugadores padecieron ante Huracán en Parque Patricios. Sorprendió el nerviosismo, la falta de respeto, la agresividad, la mana manera de dirigirse al periodismo del ex entrenador de San Lorenzo. Todo comenzó cuando el periodista Hernán Castillo, Radio La Red y Olé, preguntó cual era el problema más profundo que en los pasillos del club le habían dicho que había (Nota de hoy en Clarín). De inmediato, el D.T tildó de mentiroso a Castillo, negando la exisitencia de esos problemas. Además, le preguntó de donde sacaba esos datos y le indicó que diga nombres. "Las cosas las digo cara a cara", le retrucó Pipo. Según Gorosito se lo habría dicho tres veces antes a Castillo que no es verdad lo que escribe. No es profesional tildar a una persona de mentirosa en una conferencia que ve todo el país, Pipo se desdice continuamente. Había declarado que no era el momento de poner juveniles y el sabado pasaro metió en cancha al Pereira, de 18 años, que sólo tuvo una práctica con la primera.

Recordemosle al D.T millonario que el periodista preserva las fuentes y no es ningun "botón" para mandar al frente al informante. Las fuentes como en este caso fueron gente del club en los pasillos y jugadores del plantel pero no es leal mandarlos al frente. Esto es un fuerte indicador de que la crisis futbolística de River se ha convertido en una crisis personal y del plantel. Este inconveniente no permitió hacer preguntas interesantes. Como si esto fuera poco, Gorosito marcó cuantas preguntas podían hacer y dirigió la conferencia como si fuese el Presidente del Club. Quiso "aclarar" las cosas y ha empeorado todo. Aún no se entiende la presencia de los jugadores en dicha conferencia porque no tuvieron su tiempo para responder ni expresarse. Gerlo, Ahumada, Ferrari y Falcao se parecieron más a cuatro patovicas intimidantes que a cuatro jugadores de fútbol. Falcao y Gerlo protagonistas de la pelea en el entretiempo del partido ante Huracán no se dedicaron a minimizar ni aclarar el suceso. ¿Para que fueron?