A partir del partido de ayer entre Independiente Rivadavia de Mendoza y Chacarita, el último ídolo riverplatense Ariel Ortega volvió a ser noticia. Los primeros 45 minutos los vio desde el banco y luego ingresó faltando 35 para que termine el partido. A los tres minutos de su ingreso el Burrito se hizo amonestar por protestarle al arbitro y a partir de ahí nunca encontró su juego dentro de la cancha. Además, faltando un minuto para la finalización del juego Ortega le dio dos codazos, un empujon y un manotazo a Basualdo, ganandose de esa manera la roja directa. Recordemos que el burrito en 23 partidos jugados con Independiente (donde metió cuatro goles, tres de penal), ya había sido expulsado el 9 de noviembre pasado contra Talleres, en Córdoba.
"Por lo menos, hasta que Ortega quiera. Un contrato son dos partes. El que contrata y el que es contratado. Mientras Ariel lo desee, Independiente se lo va a seguir cumpliendo", declaró a Olé el presidente de la Lepra mendocina Daniel Vila ante la incongnita si Ariel Ortega seguirá en el club o no. Desde aca, se quiere volver a ver al mejor Burrito Ortega ese que gambeteaba y diisfrutaba de cada pelota que tocaba.
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